Hacía mucho tiempo que no preparaba una entrada para la sección "Lecturas de Cómic", que es una de mis favoritas, pero que requiere mas tiempo del normal, tanto para el scaneo como para el texto. El caso es que al final uno duda sobre cual elegir y pasa un mes y no ha hecho nada.
Bueno, vamos a corregirlo con un breve análisis de este estupendo Cómic, Slaine, que se publicó en tres tomos en la colección Cimoc extracolor a principios de los 90, fáciles de encontrar hoy en día.
Slaine es uno de esos cómics irrepetibles, únicos, que rompió moldes tanto por su temática como por el demoledor aspecto gráfico que aportaba un Simon Bisley en su mejor momento.
Por esos años la fama del señor Bisley estaba disparada gracias a su trabajo en la serie Lobo, sorprendiendo por su estilo brutal, sanguinario, gamberro, lascivo e irreverente... Mucha gente (yo incluido) empezamos a rebuscar anteriores trabajos suyos y nos topamos con Slaine...
Digo nos topamos porque, independientemente del valor gráfico, supongo a todos nos choco el enorme y concienzudo trabajo en el guión y la trama que presentaba el señor Pat Mills. Y es que Slaine además de tener acción y violencia a raudales esconde un portentoso trabajo de estudio sobre la mitología celta, y consigue abrumar al lector con infinidad de información sobre los dioses, cultos y costumbres de estos pueblos.
Me consta que a muchos se les atragantó tanta información; buscando una sencilla historia de mutilaciones y cráneos partidos con un hacha, se encontraron con una historia enorme, grandiosa y estupendamente narrada, en la que asistimos al conflicto entre los pueblos adoradores de La Diosa Femenina, frente a los nuevos Dioses Masculinos y sus seguidores.
El lector se ve sumergido en la era antigua, donde tierras actualmente sumergidas, pero que en su momento estaban por encima del nivel del mar, unían a los diversos pueblos de la cultura celta desde la actual Irlanda y Gran Bretaña a la Francia y el Norte de España.
Por estas tierras campa Slaine Mac Roth acompañado de su inseparable e inefable enano Ukko, aventureros desterrados de su tribu que acabarán jugando un papel esencial en la batalla que se avecina entre las fuerzas de la Triple Diosa y Los Lores Drunes...
A la vez que conocemos la personalidad de nuestros protagonistas vamos recibiendo información sobre las leyes que rigen el mundo celta, donde los seres mágicos aún siguen presentes y el culto a la Diosa va cayendo poco a poco en el olvido, enfrentándose a la abierta hostilidad de los Lores Drunes e incluso a la decadencia de su mensaje dentro de sus propias tribus, en las que el machismo imperante, canalizado sibilinamente por lo druidas, pone en contradicción los principios heredados de la Madre Tierra.
La personalidad resuelta y valiente de Slaine, junto a una mente abierta, aún sin contaminar excesivamente por las deformadas enseñanzas de los druidas, harán de él el candidato elegido por la Diosa para unificar a las restantes tribus en el combate que se avecina.
Para ello necesitará reunir las Armas Sagrada, artefactos mágicos repartidos entre los cuatro principales clanes celtas. Las rencillas internas, los excesos de lujuria y los sabotajes de los agentes enemigos pondrán las cosas difíciles a nuestros protagonistas.
Como se puede observar el aspecto visual del cómic es espectacular, incluso excesivo, pero Simon Bisley es así, si no te gusta allá cada uno, pero hay infinidad de viñetas insuperables. ¿Violencia?, sí desde luego... pero es que la época era violenta; las costumbres brutales pero perfectamente aceptadas, probablemente otros dibujantes pudieran haber hecho un trabajo diferente e incluso mejor, pero el contrapunto que aportan sus escenas llenas de músculos, pechos turgentes y cráneos hendidos ayudan mucho a sobrellevar la abundancia de información que contienen las páginas y que tal vez harían que la trama ahogase el dibujo.
Pat Mills (al que conocía de la serie Marshall Law, otra serie irrepetible) tiene fama de ser muy concienzudo en la documentación a la hora de preparar sus historias y de "asustar" a los dibujantes con la cantidad de detalles a incorporar en las viñetas. Aquí Bisley parece que usa el lápiz como Slaine su hacha y resuelve el problema con sorprendente y sanguinaria eficiencia.
El tercer tomo abarca el combate definitivo, una orgía de muerte y destrucción en la que el lector acabará hasta los codos de hemoglobina chorreante (ja ja ja)...
Todo un mundo, una cultura está a punto de llegar a su fin, las fuerzas mágicas van desapareciendo y la faz de la tierra no volverá a ser la misma después de esto...
En definitiva Slaine es un Cómic fantástico, único; sin duda lo lógico es englobarlo dentro del género de aventuras de espada y brujería, pero insisto en que esconde mucho mas. Ofrece acción a raudales, humor negro de la mejor calidad, personajes entrañables, villanos espantosos y un antiheroe de lo mejorcito... Su éxito es bien merecido y posteriormente se han realizado algunas secuelas que no se acercan ni de lejos a la calidad lograda en estos tres tomos.
La recomiendo sin dudar a todos aquellos que les guste la temática mitológica y no se asusten de los excesos del dibujante, que por otra parte son de los más gratificante... Para los que se pierdan fácilmente en cuanto haya que leer un poco mas de la cuenta, este no es su cómic, para los que se atrevan les espera un mundo fabuloso ya perdido para siempre...
¡Grandiosa obra! Sin duda es Simon Bisley en estado puro. Pocos cómics en el fondo entran en la categoría de los verdaderamente favoritos. Este es uno de ellos. Por desgracia no poseo la colección, pero si son fáciles de encontrar, como dices, voy a buscarla sin falta. ¡El Dios cornudo me llama, Ja ja!
ResponderEliminarMejor escucha a La Diosa!!! Cuando termines todo lo que tienes pendiente esta a tu disposición Kamerater!!
Eliminar¡Gracias! Pero esta tengo que comprármela, que tiene que estar en la estantería, je je.
EliminarPor cierto, ya terminé "La balada del mar salado". Cuando nos veamos te comentaré.